Este viernes por la tarde, vecinos de Los Aromos y la región se unieron al Vía Crucis que se realizó en el Paseo de la Virgen, un espacio creado hace unos 20 años aproximadamente y que tiene un fuerte valor religioso, cultural y hasta turístico.
“Fue un momento de recogimiento y emoción. La verdad que este espacio tiene un valor muy importante para todos y así lo vivimos”, reflexionó el presidente comunal Daniel Pastorino.
Es bueno recordar que en este lugar fue naciendo de a poco con distintas acciones vecinales. Un día, una turista dejó una imagen de la Virgen en una gruta natural de piedras y muchas personas la visitaban con ofrendas. Debido a esto se construyeron las primeras escaleras y también se restauró la imagen. Unos años más tarde, una joven familia donó un “Divino Niño Jesús ” que trajeron de Colombia, por lo que se lo protegió con una caja de cristal y se entronizó a unos metros, en el mismo espacio rodeado de naturaleza.
Fue así que un día la comunidad decidió armar un “Vía Crucis”, con sus estaciones y una enorme cruz de madera en la parte más alta, con hermosas vistas a las sierras, consagrando el predio a la oración en Semana Santa.
La pureza del aire, el canto de los pájaros, los árboles con sus hojas al viento, el sonido del agua en el río invitan a momentos de reflexión.
Por el valor que este lugar tiene para la comunidad, este año se puso en valor con mayor accesibilidad por lo que fue parquizado, desmalezado, pintado, se sumaron bancos y barandas destacando de esta manera el compromiso y esfuerzo de su gente.
